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190 EOS no. Por La victoria metafísica sublimes soldados belgas caidos heroicamente en el campo del honor, quien habia debido tener hacia ellos en el momento de la muerte un supremo pensamiento de ternura. No lloraban, tanto los agobiaban la fatiga y el sueño; apenas podían tenerse en pie. nada contestaban cuando se les preguntaba; pero separarse, eso fin el mayorcito, crispando siempre su mano en la del otro por el temor de perderle, recobro de pronto la conciencia de su papel de protector, y encontró fuerzas para hablar a la dama de la Cruz Roja que se inclinaba hacia él.
Madame, le dijo con vocecita suplicante y medio dormida, Madame, no nos van a acostar?
En aquellos momentos era todo lo que ellos esperaban de la piedad humana, que alguien se cuidase de acostarles.
Prontamente se les puso en el lecho, juntos se entiende, y se durmieron en seguida, cogidos siempre de la mano y estrechándose el uno contra el otro, sumergidos ambos en la tranquila inconsciencia de los sueños infantiles.
En cierta ocasión, hace ya mucho tiempo, en el mar de China, durante la guerra, dos pajaritos aturdidos, dos minúsculos pajaritos, más pequenos aún que nuestros gorriones, habian llegado, no sé como, abordo de nuestro acorazado y hasta el departamento de nuestro Almirante, Sin que nadie tratase de espantarles, revolotearon durante todo el dia el uno al lado del otro, posándose sobre las cornisas o sobre las plantas.
Llegada la noche les habia yo olvidado, cuando el Alm rante me hizo llamar a su departamento. Era para mostrarmelos, enternecido, al ver que los dos pequeños visitantes se habian ido a dormir a su cámara, sosteniéndose en una patita sobre un delgado cordon de seda que pasaba por encima de su lecho. Muy cerca el uno del otro, como montoncitos de plumas que se tocaban y casi se confundian, dormian sin el menor temor, como muy seguros de nuestra piedad. estos pobres niños belgas, dormidos uno al lado del otro, me han hecho pensar en los dos pajaritos perdidos en medio del mar de la China. La misma era la confianza, el inocente sueño el mismo; la diferencia tan sólo era que cuidados más dulces aún iban a velar sobre ellos.
PIERRE LOTI Le Temps citaba un articulo del Berliner Tageblatt en que se decia. La victoria alemana no es cuestión de casualidad; es una necesidad metafisica. Si los hechos que rigen la historia de los pueblos dependen verdaderamente de una voluntad superior capaz de discernimiento, podemos y debemos creer que la Providencia nos ha reservado para grandes trabajos. comentando estas estupendas palabras, dice Mr. Lavisse: Vemos, pues, aqui a Dios requerido a darla victoria a Alemania, so pena de no ser inteligente y hasta de no existir. Por mi parte, nada me extrañaria que si Alemania llega, como es de creer y esperar, a la derrota, y el Kaiser tiene que firmar una paz que no considere honrosa, antes de firmarla, firme la dimisión de Gott, su primer ministro. Aqui, en España, se cuenta de un cura germanófilo y trogloditico que decia que si no triunfa Alemania empezará a dudar de la Providencia divina y hasta de la existencia de Dios. Lo que no quiere decir sino que ya desde ahora no cree en ellas ni ha creido nunca. Pero qué es eso del triunfo de Alemania? más bien. qué es la victoria metafisica?
Porque eso de que la victoria alemana no es una cuestión de casualidad sino una necesidad metafisica, no quiere decir, en buena hermenéutica, sino que dicha victoria, ha de ser una victoria metafisica. Cuando las Escrituras dicen que se le apareció a alguien un ángel en sueños, no quieren decir sino que el tal a quien el ángel se le apareciera en sueños soño que se le aparecia. Aquel satilisimo Lessing nos lo explicó muy bien. así, cuando el Berliner Tageblatt, que es a su modo, una especie de Escritura, nos dice que la victoria alemana es una necesidad metafiSica, no quiere decirnos sino que es una necesidad alemana la victoria metafisica. Tenemos, pues, trasponiendo los Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.