Violence

54 EL CABALLERO ANDANTE. Pansıná de Mayo de 1918.
Comentarios a un crimen hubrus futuro, y creo asimisito que, por o.
bra de nuestra defectuosa organización social, flota como un im erativo de la herencia, sol re su debido tiempo, la prensa diaria lia tudns los niños y particularmente sobre los bló del niño de doce años, Manuel Rorríguez, niños de la clase pobre. un ambiente irredu1cque asesinó a una hermanita suya, dle pocos tible ha ta ahora ve ir justicia y se dolor. El ineses, golpeandola primero con una piedra y flolor transmitido con la sangre. El lados arrojándula después al Manzanares por el preque se dillud:n en los alnias recién nacidas con til del puente de Segovia.
la primer, luz, y es a ellas lo que al cuerpo la. Es responsable el precoz homicida de Sunitra!. El dolor, diluido en la leche que lo hecho. se preguntaba el público. y la sagacidail con que el matador, al principio, fluye de los senos maternales fluta invisible negó su delito, y luego elaplomo conque logloon el aire, como el polvo. estas 110 son quisara, iuducen a responder afirmativamente. Emeras de pocla sina realidades científicas, pues se niño fallecido hiace algunos días en la enfer.
la experiencia ha demostrado que los hijos ile inería de la Cárcel Molelo era consciente de 111308 padres que lluraron mucho, generalniente su crimen, puesto que supo dar al Juez la rason tristes.
zón terminante, el motivo concrete, de «por Es indispensable haber laabitado en un qué mató. Namuel asesinó a su hermana, patio de vecindad en una casa de correçlur. porque su madre le obligaba a tenerla sienna para inerir el immerso dolor. un dolor de sipre en brazos, y la criaturita lleraba muclio. glos que planea, semejante a un pajarraco ile Al muchaclio ichro. le aburria ajella carga, nialeficio sobre willares de hogares insalubres, y eu su feroz eguístno infantil se deshizo ile obscuros, fríos, sórdidos, hostilizados por los ella. Aquí, en la comprobación y circunstanie fantasmas trágicos de la ineducación y de la ciada reconstrucción del heclio delictivo, se niseria, Fn sos cuartos, contaminados de detiene el legista, quien, para castigarlo co11la tristeza del taller, reinan esa violencia, esa dignamente, le aplicará el artículo antos. cólera, que ponen en las palabras y en los adedel Código. Los médicos van más lejos: estos manes el sufrimiento. El hombre, para quien examinarán los caracteres hereditarius delala vida es desagradable, se halla inclinado a En cusado, nos hablarás de prognatismo, le depelear y a liacerle cosquillas a la mlierte.
generación, de parálisis en los centros centrí.
el alına, como en el mundu objetivo, todo es fugos, de asimetria cerebral. De ali no pisauna trabazón de lechos rigurosamente mate.
rán, pues su gran tirana, la experimentación máticos. Esamnineinos nuestra conciencia y se lo prohibe; para ellos, como para Coudillac reconoceremos que, si acogimos al amigo que la verdad termina donde alcanzan les ojos y víno a visitarnos cou uia frase incurrecta o un las manos del investigaclor. Por suerte de togesto agresivo, fué quizás, porque teníamos dos, el psicólogo, induciendo unas veces, dedulos pies fríos, y este frío determinaba en lusociendo otras, puede ensanchar ese fiorizonte tros una irritabilidad.
harto mezquino. Sin despreciar la neurona, el He aquí el origen de esas disputas que psicólogo prosiguc la sensación en lo que tie Helian de ruido y a veces de sangre las cane de espiritual, y no satisfecho con tener la sos pobres, especialmente los sábados, en que islea, busca su origen y su génesis a través de el vino, bebirlo a la salida del taller, antes la lierencia.
acucia las secretas penas que la postiza aleEn nuestro munelo ético interior influyen, gira de los obreros. Al volver, malhumorado, evidentemente, el teniperamento de nuestros de su trabajo, el marido, por el detalle más niprogenitores, la alimentación, las enſerineda mio se irrita y abofetca a su mujer; la cual, des y otros factores de orien físico; pero a su vez, para desaliogar de algún modo su sería temerario negar que, tanto cólera, vapuleará a los niños. Estos nada quellos agentes, ejercen acción directa sobre pueden hacer y se acostarán llorando; son los posutros otras fuerzas de estirpe moral, ta más débiles; pero la convicción de que fueron les como la educación que recibimus el al castigados injustarvente incubará en ellos un biente de sufrimiento o de alegria que roilea oliv, un estado malsano de rencorosa excitanuestros primeros añes. Yo creo que en la ción, y a la mañana siguiente, cuando se enduericia está contenido el hombre. todo el cuentren en la calle, se pegarau usos a los cono a