20 EL CABALLERO ANDANTE Panamá 13 de Abril de 1918.
Lo que se va cosas, medida que la burguesía se ha enri.
quecido, el elemento ocioso y pasivo se ha ido engrosando a cxpensas del activo y tra.
bajador.
De la degenersición moral de las ciasca Hoy el burgués quiere a toda costa kr directoras, hoy londe quiera y singularmen. propietario o capitalista, vivir de la renta o to entre nosotros muniliesta, una honda endel interés, a provechar esos títulos jurídicos señanza se deriva. Como todas las domina.
que nuestra abstracta y falsa concepción del ciones en la historia, el mundo burgués moderecho confiere a algunos sobre el trabajo rirá por do más ha pecado.
c? Ins demás, aparecer como un jubilado del La mesocracia llegó al poler, con la re.
urden de la producción.
volución, ávida, envidiosa, llena die ambicies.
nes, de rencores y concupiscencias, pero ta 11.
El burgués alquila su casa, arrienda su bién inteligente, perseverante, laloriosa y tierra, presta su capital y se consagra al ocio. Cada dia que pasa aumenta en la in.
proba. La desaparición de esta última, la dustria el número de asalariados y estos lo más característicamente burguesa ile todas las virtudes, anuncia para la clase que con hacen todo, desde el trabajo manual hasta el intelectual: obreros, capataces, sabios, emella pierile su título moral de existencia; el adrenimiento moral de lo que se ha llamado presarios, mientras el burgués enriquecido gráficamente el principio del fin.
por la herencia o la usura vive a expensas de Obtuvo la burguesía riqueza y poder aquellos a quienes tiene a su servicio. El día (dos nombres distintos de una mis:na cosa)
en que esta evolución se consume, habrá su.
nado la última hora de la burguesía.
por el propio procedimiento que ha survido a todas las instituciones Si la inmoralidad no es la causa del de.
y clases obte.
para per tan codiciados bienes. Hay en cada mo.
rrumbamiento de los poderes históricos, es mento de la civilización una siccesidad que seguramente su síntoma; que las institucio.
nes apenas comienzan a ser inútiles se co.
urge satisfacer. Quien satistace esa necesidad y cumple csi misión se hace ipso facto pode rronipen, conforme al profundo apotegma vul.
roso y rico. Si es un individuo se llamará gar que pone en lo ociosidad la fuente de to.
Roma, si una institución se llamará la Igle dos los vicios. Mal podrá, pues, sobrevivir la burguesía al desenfreno engendrado por el Mas estas dominaciones, fundadas en el pleno desarrollo en la prosperidad del viejo fermento de sus codicias cumplimiento de una misión histórica, nacen ambiciones.
con ella y con ella mueren. Sea que el fin se El movimiento uniformente acelerado de baya logrado, sea que la institución encar la civilización explica en parte la rápida de gada de hacerle efectivo le deserte y abando crepitud del régimen burgués. Pero tiene este ne, tan luego como el fin le falta, la institu fenómeno otra causa.
El sistema capitación decae y sucumle. Poco a poco esos polista es de suyo deletéreo y corruptor. Los deres que lueron pujantes van convirtiéndose antiguos dominadores, papas, reyes, nobles, en detritus y cadáveres interpuestos en la habían de hacer algo para conservar su po.
corriente de la civilización, que al cabo arras. der. No tenían el beneficio sin el oficio. ΕΙ tra sus fragmentos. Así el sacerdocio, así la capitalista moderno tiene la ventaja sio la nobleza, así la monarquia han ido perdiendo carga, Gozar de la suyo es su única obliga.
uno a uno sus privilegios y atribuciones a ción social. Semejante a Dios, es porque es.
medida que han dejado de desempeñar su ¿Qué no harán los hombres por alcanzar función social.
situación tan privilegiada? No lo buscaa Que la burguesía está dejando de desem. por el áspero camino del trabajo. El sistema peñar la suya, es un hecho patente. El mun capitalista ofrece a la codicia otros medios do burgués se ha compuesto siempre de dos de satisfacción más fáciles y rápidos. Ahi eselementos; uno activo, laborioso, lleno de ini. tán, el juego, la usura, el ágio, el chanchullo, ciativa de energia; otro pasivo, inerte, la prima, todas las infinitas formas de hacer atento a gozar más que a adquirir, y más moneda con la sangre y el sudor ajenos, AI.
dado al ocio que al trabajo. No por pervertorizadas por la ley y por el uso consagra.
nión de los hombres, por ley natural de las das. En esos bazares de conciencia la forte sia.