Panamá, Lunes de Noviembre de 1947 EL OBRERO Página 31 TERRUNO, NACION, HUMANIDAD las los cia.
DEL TERRUNO LAS FUERZAS MORALES. de José Ingenieros sentimientos a milones de homEl terruño es la patria del cobres que cambian de nacionalidad razón. De todos los sentimientos tiene sus raíces en el corazón.
humanos, ninguno es más natural al lugar donde transcurrió su in amar intensamente a todo su pue cuando lo resuelve un consejo de que el amor por la alden, el valle al horizonte geográfico. Nadie ama le toda la savia con que alimento orientarlo con sus ideales.
El patriotismo ingenuo se limita fancia, como si quisieran devolver blo, de honrarlo con ous obras de diplomáticos o lo impone con su garra un conquistador. El sentio la barriada en que vivimos los espontáneamente regiones y hom su personalidad en la hora del El sentimiento de solidaridad de che miento nacional, que florece en las primeros años. El terruño habla a bres cuya existencia ignora. La amanecer.
nuestros recuerdos más íntimos, vista y oído marcan el confín de nacional debe tener un hondo sig uniones de pueblos afines, no conestremece nuestras emociones más la experiencia primitiva; todo lo rativo natural. Persiste cuando la de los pueblos es incompatible con tismo político, encaminado a conEl amor al terruño es un impe nificado de justicia. El bienestar cuerda forzosamente con el patriohondas; un perfume, una perspec que está más allá es ajeno, fabu experiencia dilata el horizonte rutinarios intereses creados, y de sagrar los resultados de la camánun. a. o en nuestra imaginación. Todo lo de su barriada, de su aldea, de su didad tanto como gana en superfi rarse en credos nuevos: despertar la armonía entre las regiones y las Cuando la justicia no preside a suyo lo sentimos nuestro, en algu valle, de su montaña, es desterrar cie. En cierto grado del desarrollo la energía, extinguir el parasitis clases de un Estado, el patriotisna medida; y nos parece, también, lo de la única patria sentida por social es imposible que cada temo, estimular la iniciativa, supri mo de los privilegiados ofende el que de algún modo le pertenece su corazón. Todo el resto del mun rruño viva separado de los veci mir la ociosidad, desenvolver la co sentimiento nacional de las victimos, como la hoja a la rama.
do es igual para el hombre que nos; poco a poco, los que tienen operación.
Et amor al terruño existe ya en no ha viajado; fuera del terruño intereses comunes, creencias senas deben sobreponerse a las an con abstracción ajena a la reali el clan y la tribu, soberano en puede exclamar con sinceridad que mejantes, idiomas afines, costum tiguas, conviritiendo el sentimien dad social, fue siempre caracterísel Horizonte exiguo de las socie donde está el bien está la patria. bres análogas, van formando so to nacionalista en fecundo amor tico de tiranuelos que inmolaron dades primitivas. Ligado al medio No se le ama porque se ha na ciedades regionales cada vez más al pueblo, conforme a los ideales los ciudadanos y deshonraron físico desde que el grupo se adap cido en él, sino porque allí se ha solidarias. La educación sentimen del siglo. Es justo desear para la naciones. Anque invoquen la patria ta a la vida sedentaria, se acen formado la personalidad juvenil, tal permité abarcar en la amistad parte de humanidad a que perte par dra al calor del hogar. La consan que deja hondos rastros en todo el y en la simpatía a otros terruños, necemos un puesto de vanzada en son enemigos de la nacionalidad, para cubrir su bastardía moral, guinidad lo alimenta y la amistad curso de la vida. Ese tierno afecto aunque siempre reservando para las luchas por el progreso y la ci los lo ahonda; la simpatía lo extiende no está ligado al involuntario ac el propio los mejores latidos del vilización. En una hora grata de de su pueblo, los que lo oprimen.
los que no presienten el devenir a todos los que viven en vecindad cidente del nacimiento, desde que corazón. Cuando el niño aprende a juventud, anticipamos estas pala los que lo engañan, los que lo exhabitual. En el terruño se oyen las a nadie se le pregunta antes dón conocer a los hombres y las cosas bras explicativas: Aspiremos a primeras menas maternales y se de desearía nacer; germina en la de su ciudad o de su región, rela crear una ciencia nacional, un ar sirven y adulan a los poderosos y plotan. Enemigos, también, los que se forman las intimidades de co nes e ideas, cariños y creencias. o de su aldea, el amor del terru un sentimiento nacional, adaptan: a los déspotas; Histriones o lacalegio y se sienten las inquietudes El tesoro de nuestros recuerdos ño se ensancha. El sentimiento do los caracteres de las múltiples mentira patriótica, de los mercadeveniles ilusiones y se tropieza con siones del terruño; cada vez que un patriotismo en función del me. tro medio físico y sociológico. Así mes es la antitesis del tierno sentipatriotisinesperadas realidades; se adquie el ánimo afectado busca refugio dio, elaborado sin sugestiones po como todo hombre aspira a ser al mo del ren las más hondas creencias y se en la propia vida interior, revivi líticas. Su genealogia es sincera. guien en su familia, toda familia mo del corazón y de la armonía contraen las costumbres más firmos las escenas del hogar, de la Brota sin cultivo, como la flor sil en su clase, toda clase en su puetos al nacionalismo civil. El pames. Nada en el nos es descono escuela, de la calle, como si las vestre.
cido, ni nos produce desconfianza. remembranzas de la edad primera En fases de avanzada cultura, txo pueblo sea alguien en la hu triotismo convencional de los políLlamamos por su nombre a todos pudiesen aliviarnos en el andar las ciudades o regiones tienden a manidad. en la ovación Aticos es el nacionalismo ingenuo de que los vecinos, conocemos en detalle accidentado de los años viriles.
pueblos como los fuegos artiasociarse en estados políticos, for subrayó esas palabras creímos ficiales a la luz del sol.
todas las casas, nos alegran todos La fuerza del sentimiento luga mando naciones; sólo en la medida sentir un homenaje a los revolulos bautismos. nos afligen todos reño se comprende mejor a la dis de su afinidad los pueblos pueden cionarios de América, que, cien sus conciudadanos, los educa, los los lutos. Por ello sentimos en el tancia. Viajando lejos, muy lejos, sentirse solidarios dentro de la años antes, habían vibrado por alienta, los dignifica, los honra; el fondo de nuestro ser una solida en ciertas horas de meditación lle unidad nacional. Pero individual análogos sentimientos, emancipanridad intima con lo que pertenece ga a convertirse en esa angustia mente, como representación de in do al pueblo de una opresión que que lucha por el bienestar de su a la aldea, al valle o la barriada indefinible que llamamos nostal tereses e ideales colectivos, este pueblo, sacrificándose por emancilo envilecia.
en que transcurrió nuestra infan gia. Todo el que la ha sentido, sa patriotismo sólo es sentido consparlo de todos los yugos; el que El patriotismo nacional se ex cree que la patria no es la celda be que no es del estado político, cientemente por muy pocos hom tiende al horizonte político. Mien del esclavo, sino el solar del homNingún concepto político deter sino del terruño; nadie añora lu bres superiores, capaces de refle tras pueblos de origen distinto se bre libre. Nadie tiene el derecho mina este sentimiento natural. Es gares ni personas que nunca ha xión histórica y de abstracción po desenvuelvan en medios diferentes, de invocar a la patria mientras no innecesario estimularlo con suges conocido, ni podría curarse el áni litica.
existirán agrupaciones nacionales pruebe que ha contribuído con tiones educacionales, porque es an mo nostálgico yendo a vivir en En todo caso la querencia sigue con características diversas, en lo obras a honrarla y engrandecerla.
terior a la escuela misma; se ama rincones ignotos del propio país. atrayendo al hombre, como a los ético y en lo mental. Esta hetero Convertirla en instrumento de facal terruño ingenuamente, por insA medida que se avanza en edad animales. Pujante y profundo co geneidad es conveniente para la ción, de clase o de partido, tinto, con espontaneidad. Es amor los recuerdos del terruño se idea mo un instinto, imperativo, in armonía humana; el conjunto es pequeñecerla. No es patriotismo el vivido y viviente, compenetración lizan, olvidándose todo lo malo, transmutable, sobrevive en todos beneficiado por la acentuación del que de tiempo en tiempo chispodel hombre con su medio. No tiene acentuándose todo lo excelente. los hombres el amor al terruño, los rasgos propios de cada una, en rrotea en adjetivos, sino el que símbolos racionales, ni los necesi es común que los hombres, al mo único y siempreviva patria del co el Sentido más adecuado a su me trabaja de manera constante pata; su fuerza moral es más honda, rir. pidan que vuelvan sus huesos razón.
dio. La tipificación nacional ensan ra la dicha o la gloria común.
DE LA NACION cha y perfecciona el primitivo El trabajo y la cultura son los amor al terruño, extendiéndolo al sillares de la nacionalidad. Es vaLa nación es la patria de la vi horizonte civil de la nación. na quimera toda esperanza que da civil. Su horizonte es más am Cuando pueblos heterogéneos se no pueda alentar una acción; estéplio que el geográfico del terruño, encuentran reunidos en un mismo ril toda energia no animada por sin coincidir forzosamente con el Estado, los vínculos morales pue un ideal. El trabajo es la matriz político, propio del Estado. Supo den faltar y la unidad es ficticia de la grandeza colectiva, pero caCortesía ne comunidad de origen, parentes mientras hay subyugamiento. No rece de estimulo si el sueño no co racial, ensamblamiento históri existen ideales comunes a los opre hermosea la vida; la cultura es la co, semejanza de costumbres y desores y a los oprimidos, a los pa legítima coronación de la vida cicreencias, unidad de idioma, suje rásitos y a los explotados. La au vil, pero agoniza cuando se extinción a un mismo gobierno. Nadatoridad no basta para imponer gue la fortaleza de obrar. Un puede la de ello basta, sin embargo. Es indispensable que los pueblos regidos por las mismas instituciones se sientan unidos por fuerzas mo FARMACIA AMERICANA rales que nacen de la comunidad en la vida civil.
Prop. Javier Morán El patriotismo nacional surge naturalmente de la afinidad entre los miembros de la nación. No lo Drogas frescas y recetas preparadas por impone la obediencia a la misma ley, ni el imperio de la misma auexpertos farmacéuticos toridad, pues hay Estados que no Ave. Central No. 110 Tel. 57 Productora del Mejor de los Jabones son nacionalidades y naciones que no son Estados. El sentimiento civil, el civismo, tiene un fondo mo.
al, en que se funden anhelos de 15 y ritmos. Renán lo defi2) temple uniforme para el rzo y homogénea disposición ALMACEN EL GLOBO para el sacrificio. Es conjunción de ensueños comunes para emprender grandes cosas y firme decisión de realizarlas. Es convergencia en MERCANCIAS EN GENERAL la aspiración de la justicia, en el deber del trabajo, en la intensidad Apartado 2115 Tel. 1150 de la esperanza, en el pudor de la Ave. Central y Calle humillación, en el deso de la gloria. Por eso es más recio en las conspicuas, capaces de emJABONERIA EL PACIFICO CONDOR nientes BIBLIOTECA NACIONAL ERNESTO CASTILLERO