Socialism

mánicas que invadieron el Occidente, aun cuando es peculiar a toda agre.
gación bárbara de análogo carácter, como la horda tártara o la indiada patagónica. aunque la titulen después colectivismo, socialismo, maximalismo, no pierde su filiación histórica ni su condición esencial.
Verdad, razón y justicia, son para el hombre libre otras tantas satisfacciones de la conciencia individual, con arreglo a las cuales se gobierna cada uno. De suerte que toda imposi.
ción de una de eilas a la fuerza, le causa una tortura que llama despotismo. Mas, para raciocinar así, resultando la entidad libre que suponemos, el individuo debe ser un hombre civi.
lizado. Entonces le parecerá naturalmente absurdo imponer a nadie por la fuerza la verdad, la razón y la justicia.
Sabiendo, además, que estas últimas son variables en relación a los conoci.
mientos adquiridos por el hombre, no las presentará como conclusiones perfectas o finales, sino como proposiciones relativamente satisfactorias, que su interlocutor puede o no aceptar, sin acatarlo ni ofenderlo, según el 370 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud Costa Rica.