la consiguiente desmembración de Colombia; la intervención en Nicaragua y la permanencia de un batallón del Ejército norteamericano en Managua; la ocupación por la fuerza de Santo Domingo y el dominio absoluto de la administración militar en toda la República; su actuación semejante en Haití, y sus procedimientos en todas las Repúblicas hispanoamericanas, imposiciones habrán sido de esas orga.
nizaciones de clase; de donde vendría a deducirse que el Gobierno Norte.
americano no obedece a los resortes de la ley moral, de la civil y de la Constitución Nacional, sino a los «procesos subrepticios, indirectos e ilega.
les» de organismos malamente llamados políticos, sin otra idea que la realización de los intereses de los «autó.
cratas u oligarcas» que los dirigen y «poseen y ejercen el poder de premiar y castigar y tienen buena memoria y fuertes brazos. Pero leamos a Mr. Hunt: El principio básico de nuestra teoría política y legal es que la sobera.
nía reside en el pueblo. Ciertas fun.
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