lugar como Soi jer fem hecho cara dis la muje: dueña Por cina y cifras, o también la de una abogada que pleitea, o la de una médica. también la de una mujer que escribe novelas dijo el periodista. Perfectamente; así es. Voy a decirle una cosa que le hará sonreir.
Muchas veces experimento un gran placer al dejar mi mesa de trabajo, mi pluma, mis papeles, todas las herramientas profesionales, para hacer labores de tapicería, bordar, coser y hasta cocinar. Aunque parezca raro en una escritora, entiendo algo de cosé preparar muchos platos que mis amigos encuentran suculentos.
No; yo no escribo por placer. Mientras trabajo, las horas suenan, la vida pasa.
iy cuántos espectáculos de la Naturaleza pierdo que ya no podré ver. Si existe, como dicen, una evolución femenina, si vamos hacia una vi.
da de amazonas, en la que la mujer será la enemiga del hombre, hacia una vida espantosa, pues en ella no habrá ternura, seréis vosotros los hombres los causantes de esto, o mejor dicho, vuestro egoísmo internal. Os hace fal.
ta una dote para casaros, y la mujer que no la tiene se imagina que 498 ta cada menos un sér sola y sidad al ser una transfor, Si resul jer ser igual, si gracia bedrio; en libert mujer u ser una dulce en que la a dista si educació Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregon Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud Costa Rica