Bacredita sino que e los po ptan se. En el En, sobre a misma 3, la po al como su ma. el manla curul sacrifíc de la huponemos ve (1) para convencernos de que aquél es precisamente el concepto que James combate desde el principio. La primera necesidad del hombre es que le enseñen y no que le gobiernen. En el fondo, el hombre es un sér ingo.
bernable, que en resumidas cuentas no se somete a ninguna ley. salvo a la que le impone su propio sentido de adaptacións. No es posible. mantenerlo en su lugar. por la sencilla razón de que su existencia entera con.
siste en el proceso de abandonar un lugar en busca de otro nuevo, obedeciendo a un impulso creador que sería pecado desmentir y un crimen contrarrestar.
Que tal es la conclusión a que finalmente nos lleva «la voluntad de creer. paréceme harto claro en vista del pasaje de las Letters que acabo de citar. En este sentido, el xhuma.
nismo» y el «americanismo» de James son dos nombres distintos para una misma cosa. diferencia de su herT tempeivicción, linar el en el culativa, Terza fahistoria.
a civili. la idea euya priser goleído el to BelieE. 1895, el año anterior a la publicación de The Will 10 Beliere (La voluntad de creer. escribia a Théodore Flournoy. Espero que (su8 bijas) se eduquen de una manera ampliamente libre, como verdaderas jóvenes norteamericanas, sin más leyes que aquellas que les imponga su propio sentimiento de las couveniencias. 437 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.