estación, doctrina tesis de valor, se ación de trácter y hombre zicólogos privación amen ha tempe.
siderarse el pre minados maravi.
les de la nuestros turbable rdadera nitiva, la menor ncia son ncia de a, y tras isión de la virtud, o de enviduo en la República por la vía más conforme con la capacidad de cada uno.
Como habéis visto, señores, por la rápida exposición que de las doctrinas de Huarte os acabo de hacer, el deseo de mejorar la condición humana en general no fué ajeno a la redacción de su obra, pero el propósito cardinal que la inspiró fué el de refutar errores filosóficos incongruentes con el genio de su raza, para contribuir a la gloria de su patria y a la felicidad de sus conciudadanos, apartándolos de las extraviadas sendas a que podía arras.
trarlos fácilmente el desconocimiento de sus propias aptitudes y demostrando que lạ moral, la política y la educación de un pueblo deben descansar sobre la base de una acertada y previsora psicología.
Algo parecido, aunque salvando la natural distancia que forzosamente ha de mediar por su indole diversa, entre aquel luminoso haz de científicas investigaciones y la más alta ficción que jamás conocieron los tiempos, puede decirse del Quijute, porque si tuvo Cervantes la suerte de sorprender, consciente o inconscientemente, 423 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica