El movimiento Biológico en Europa por Georges Bohn (fragmentos)
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ajos que bastante nadre y tos avivivirás charme, Heildelberg parecía deber convertirse en un foco de los más brillantes para las investigaciones biológicas, pero su fuego no ha tardado en apagarse. Un mal extraño ha venido a contener o impedir completamente la producción científica de aquellos jóvenes y ardientes cerebros. Este mal ha sido causado por las teorías vitalistas, que tantos estragos han causado en los medios científicos de Alemania, desde el tiempo de Stahl hasta el de Hans Driesch. Aun en Francia era evidente la contaminación en 1904. Afortunadamente, Giard supo dar la voz de alerta en el Congreso Internacional de Filosofía de Ginebra, y Anna Drzewina desbarató en la Revue des Idées la argumentación en que basaba Reinke su intento de conciliar el determinismo y el vitalis.
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