fue cor soc for edi el zas res ell: COS las do ch: os su el Estado asume, ejerciendo un papel de promotor del bienestar de la comunidad.
Mas si penetramos en el móvil que guía al Estado al dirigir la educación, encontramos que no lo hace movido por un interés semejante al que le induce a promover otros servicios que afectan la salud y la vida.
Aunque parezca absurda la afirmación, puede decirse que al Estado no le interesa la empresa de educar por educar. La perspectiva de que los cien mil niños que ingresan anualmente al primer grado debieran ser conservados en las bancas de la escuela y del colegio, tolerando sus incapacidades y limitaciones, satisfaciendo sus capri.
chosas vocaciones, consultando en cada caso las conveniencias impuestas por las circunstancias personales y de la familia; la idea de que el Estado debería, no sólo retener al alumno en las aulas, sino atraerlo con amables cebos; en una palabra, la sola idea de que la escuela fuese como un gran sanatorio hospital. gimnasio en donde (diremos figurativamente) se lavase al sucio, se curase al enfermo y se diera 254 la gai tiei INAY Co do cre Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregon Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud Costa Rica.