de gue El móvil que menos efecto produjo fué el de la variedad egoísta, del propio interés, el del espíritu patriotero de los que se decían. Con razón o sin ella, pero era mi país que estaba en peligro de muerte. Si la razón de ser de la guerra se le hubiera presentado con franqueza a la nación como ventajosa únicamente para Inglaterra, no habrían sido muchos los voluntarios. La gente de sana moral no habría combatido para destruir una rival comercial o anexarse las colonias alemanas del Africa oriental. Aun en la misma Alemania, con su tradición de militarismo y su costumbre del servicio obligatorio, la guerra hubo que pintársela al pueblo como una guerra por la Kultur y por el bien de toda la humanidad. Al pueblo de Inglate.
se le había enseñado nunca que la moralidad tenía su principio y su fin en el imperio británico. Por lo tanto no hizo mucho ruido el patrio.
tismo que no buscaba sus motivos más allá del bien del imperio. Antes, al contrario, nos deleitaba pensar que íbamos a perderlo todo y a no ganar nada. Esto no era hipocresía, a pesar cua los do.
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pia pat hac seg en de difi ral alg en su pei el rra no mo qu Bé la se cia la 186 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud Costa Rica