il n u is en 10 28 )1. cuando se trata de dolores reales y sentidos, esos apóstoles los irri.
tan con absoluta falta de generosidad, revelando al infeliz la extensión de su miseria, poniendo sus llagas al descubierto, pero guardándose bien de curarlas (porque esta nueva especie de filántropos no admite la caridad) sino, por el contrario, vertiendo en esas llagas vinagre. En vez de decirle que también los ricos en sus soberbios palacios quizá sufran no menos que él (pues placeres y dolores, necesidades y deseos, todo es relativo en este mun.
do. le afirman con mentira que la causa de su miseria es el lujo de los ricos. de ese pobre hombre hacen un malvado, enseñándole a envidiar y aborrecer.
Lo que los socialistas quieren, mucho más que la recta interpretación de la estadística y de los fenómenos económicos, es formar las almas en la religión del odio. GAROFALO s, is s y 127 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud Costa Rica