ca ros industriales y agrícolas, querrían guardar para sí las riquezas adquiridas más bien que ponerlas todas en común.
Entre tanto, los nuevos socialistas, que por un lado pretenden hablar en nombre de la ciencia sociológica y de las leyes naturales de la evolución, por otro lado se afirman en la políti.
Como un partido revolucionario.
Pues bien: es evidente que la ciencia 110 tiene nada que ver con esto. Por más que cuiden de advertir que por la palabra «revolución» no entienden un motín ni una sublevación (lo cual sabíamos ya, puesto que lo explica el Diccionario. siempre resulta que no quieren aguardar la organización espontánea de la sociedad en el nuevo orden económico por ellos entrevisto en un porvenir más o menos lejano; pues de lo contrario. quién de ellos sobreviviría para demostrar a los in.
credulos la certeza de sus previsiones?
Trátase, pues, de una evolución apresurada artificialmente, o en otros términos, del uso de la fuerza para transformar la sociedad según sus deseos.
Tal es el sentido del llamamiento a la unión de las fuerzas del proletariado, 80 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud Costa Rica