son amos, y a fuer de tales, destinados a provocar el odio.
Si el orden social existente sobrevive a la crisis económica actual, tendrá oportunidades vastas y admirables, tales como jamás se han presentado a sociedad alguna de que haya recuerdo en la historia. Nuestra riqueza material, nuestra organización, nuestro capital de conocimientos, nuestras má.
quinas de locomoción y destrucción no tienen precedente y exceden cuanto nosotros mismos podemos imaginar.
Por otra parte, sabemos lo que debemos hacer. Tenemos lo que jamás ha poseído imperio alguno o grupo de potencias: planes definidos en la vía que habrá de conducirnos desde los peligros que nos envuelven al presente hasta regiones más saludables. Tenemos la liga de naciones, con el espíritu que encarna: la reconciliación y reintegración económica de la colec.
tividad europea; y el sistema de mandato en la administración de territorios atrasados. Tenemos el poder y conocemos el método para llevar a efecto 18 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica