sangre, y así lo ha cumplido siempre, incluso en esta guerra, en que por su re.
suelta obstinación en no tocar ni un fusil, ha sido preciso destinarlo a enfermero y otras funciones de no combatientes. esto es lo que, en las presentes circunstancias, constituye la característica de los cuáqueros, lógicos inexora.
bles y cuyas exageraciones result an harto disculpables. Porque aferrados a la interpretación estricta de los divinos preceptos, no quieren pagar diezmos, puesto que la Biblia no habla de ellos; no quieren tomar parte en juegos y bai.
les o asistir a óperas y comedias, ni a conciertos y espectáculo alguno, pues el Apóstol dejó ordenado que todo debía hacerse para mayor gloria de Dios; prescinden de llevar botones en sus ves.
tidos, siempre toscos, por no incurrir en el pecado de usar vanos adornos, y tutean a todo el mundo, incluso a los reyes, por ser el tratamiento de vos contrario a la sinceridad; y ya llevados de ese radicalismo moral, abominan de los filósofos y desprecian la razón. ese arte de volver obscuro lo que está claro, que forma escépticos y no fieles. El cuaquerismo fué transportado a 411 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica