Proudhon

que damos trar más allá de lo mensurable y lo tangible, descifrar la piedra y llegar al secreto de las cosas, si no produce verdades que la ciencia pueda aprovechar, sube en cambio más que cualquier otro espíritu hasta las proximidades de ese ideal a tradicionalmente el nombre tradicional y teológico de Dios. si ese ansioso esfuerzo para llegar al lado de Dios, como dice Proudhon, no hace que la tierra dé más frutos ni que disminuyan los dolores humanos, promueve una alta educación espiritual, levanta los corazones, eleva desde la grosera materialidad hasta las formas más be.
llas más puras del pensar y del sentir, y da dulcemente a la vida no sé qué gusto divino. Hugo es, de todos los poetas, el que, en su ardiente idealismo, se acercó más al lado de Dios. Ese sollozo agitado que conmueve toda la obra de Hugo, parece quitarle la suprema serenidad que es la belleza soberana del arte. Pero serenidad es indiferencia. Nada hubo más sereno si Vd. me permite la comparación que Minerva, protectora de no 320 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud Costa Rica.