se traduce precisamente y a no tardar en una mengua de aquella fuerza de natural defensa que todos poseemos contra la agresión de los agentes exteriores; lo que, conio es consiguiente, ha de dar por resultado una mayor disposición a enfermar. Ah. si aun aquí terminara tanta serie de desdichas!
No hay tal, por desgracia; sino que, si a este individuo le da por escoger compañera y tomar el estado de matrimonio, es muy probable, o bien que su tálamo resulte estéril, por aquella tendencia natural a la extinción que tiene toda estirpe degenerada, o bien, si tan menguada e inarmónica existencia se transmite a otros seres, es muy de temer para tan pobres vástagos toda una cohorte de trastornos, principalmente de los centros nerviosos.
Bien se os alcanzará después de lo dicho la razón por la cual más especialmente será el sistema nervioso el que se resienta en la prole. Si este sistema, en 128 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y juventud, Costa Rica