Elías Jiménez Rojas

Reproducción Tomo III. Número 42. 19 de Octubre de 1920 Director: Elías Jiménez Rojas Apartado 230 San José, Costa Rica Retrato de Bolívar Bolívar tenía la frente alta, pero no niuy ancha, y surcada de arrugas desde temprana edad, indicio de pensador. Pobladas y bien formadas las cejas. La nariz larga y perfecta. Tuvo en ella un pequeño lobanillo que le preocupó mucho, hasta que desapareció en 1820, dejando una señal casi imperceptible. Los pómulos salientes, las mejillas hundidas, desde que le conocí en 1818. La boca fea y los labios algo gruesos.
La distancia de la nariz, al superior, era notable. Los dientes blancos, uniformes y bellísimos; cuidábalos con esmero. Las orejas grandes, pero bien puestas. El pelo muy negro, fino y crespo; lo llevaba largo en los años de 1818 a 1821, en que empezó a encanecer, y desde entonces lo usó corto.
Las patillas y bigotes rubios; se los afeitó por primera vez en el Potosí en 1825. Su Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica