Joni Miiscelánea din TO Como encargado de uno de los alum.
nos del IV año, me dirigí al Sr. Director del Liceo de Costa Rica, en la última semana de julio, con el fin de llamarle la atención sobre el abuso cometido por dos profesores de ciencias que habían señalado para sus lecciones la hora de a.
he Había abuso, a mi juicio, por dos clases de razones: de higiene y de ur: banidad, comprendiendo con este últi.
mo nombre el conjunto de atenciones que hacen agradable la vida social.
Se pecaba contra la higiene por dos motivos: por el número de ejercicios escolares que se veían obligados a soportar los alumnos entre el desayuno y el almuerzo y por la hora escogida para comenzar dichos ejercicios.
Esto de la hora era lo más curioso.
Vivimos en un clima tropical y húmedo, en donde la mayor parte de la pobla.
ción revela desde la infancia cierto entorpecimiento del hígado y de los riñones y una inmensa predisposición 434 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.