ce muchos años en The Atlantic Monthly y modificadas para adaptarse al concepto: En un problema sobre el cual han meditado los sabios y aguardado largo tiempo antes de determinar el punto más sólido de aproximación, de pronto se precipita el radical con la cabeza baja desde cualquier punto de la línea que ocupe en aquel momento. y el problema desaparece.
La actitud que asumen respecto del cambio la mente conservadora y la mente radical es característica e interesante.
La mente conservadora siente una lepulsión orgánica hacia lo nuevo. Todo lo nuevo es erróneo. La innovación es el pecado original de la sociedad. La idea es nueva, pero excelente. decía últimamente cierto conservador típico, discutiendo una innovación inofensiva. Lowell pinta admirablemente este sentimiento en las líneas siguientes: bem como Así, me vuelvo Tory por ahora, JY juzgo al radical un importuno, Incapaz de comprender, el testarudo!
Que aquello que fué bueno en el pasado Seguirá siendo bueno en el futuro. Dit La mente conservadora es tímida ante las nuevas ideas como una chiquilla en 418 Este documento propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.