la primera parte de la guerra, el Estado suspendía los contratos, multiplicaba los decretos de moratoria inconsiderados, agarrotaba la prensa e imponía el criterio oficial, sacudía la vida económica a golpe de decretos contradictorios, confiaba las tareas administrativas a muche.
dumbre de pequeños potentados testarudos y sintetizaba, en su delirio autocráti: co, la incompetencia técnica y la incompetencia psicológica, poco a poco, lo ha sustituido la iniciativa privada. Las Cá: maras de Comercio organizaron su acción y la han hecho aceptar al Gobierno; latos funcionarios de uniforme y títulos ceden el paso a ingenieros, hombres de negocios y a industriales; y en fin, el propio Estado se ba agregado comités técnicos, a título de consejo o les ha delegado parte de sus poderes.
old TITO El individuo, más suspicaz y exigente en sus relaciones con el Estado, sin duda, mejorará sus relaciones con sus conciudadanos. El particularismo del francés, que a veces se expresa en expansión vigorosa, se altera en muchos casos y se reduce a un egoísmo ininte391 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.