como En la gran institución para trabajos de investigación, sostenida en Alejandría por los Tolomeos, hizo el Estado su primera aparición como promotor de las ciencias y de las artes. La brillante contribución de la escuela alejandrina no se debe por completo, sin embargo, a las facilidades de observatorio, biblioteca, casa de disección, laboratorios y colecciones, ni siquiera al talento de eruditos fecundos. En el Museo, en las universidades modernas, se reunían astrónomos, geógrafos, matemáti.
cos, físicos, naturalistas e historiadores que, además de estudiar y meditar, se incitaban mutuamente, por medio de conversaciones y debates, a mayor brillo e incandescencia, como brasas depositadas una junto a otra.
Las centurias décimosexta y décimoctava presenciaron el establecimiento de varias academias de investigación, cuyos miembros examinaban y criticaban sus propios trabajos para averiguar y decidir aquel que merecía los honores de la publicación. Italia estuvo a la cabeza en la for.
mación de tales agrupaciones, de las cuales fué la más famosa la academia dei Lincei que contó entre sus primeros socios al gran campeón inglés del método de inducción, Lord Bacon La Academia de Ciencias de París, establecida eu 1666, tiene los 272 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.