no en los elementos permanentes que conserva, sino en las nuevas formas de que reviste al lenguaje, modificándolo, notamos, desde luégo, que varía con el tiempo; y las causas de donde provienen estas variacio.
nes, que no son el uso mismo, determinan por los mismos pasos, el valor propio de las prácticas noveles comparadas con las cesantes.
Si la literatura, como dijo una escritora ilustr es la expresi de la sociedad, será bueno o malo un cambio en el lenguaje según que responda a un avance de civilización o a una avenida de barbarie; que no es progreso mudar de situación, ni siquiera caminar adelante, si no ir a lo mejor, marchar con buena orientación, y la experiencia histórica nos enseña que la civilización aunque no retroceda literalmente, tampoco progresa por necesidad forzosa, y a las veces se paraliza, a las veces ciega y loca se extravía. Por lo que mira a los actos exteriores del pensamiento, y es el aspecto a que debo circunscribir mis observaciones, es bueno el uso centemporáneo cuando acrecienta la lengua sin alterarla, cuando se asimila lo ajeno sin pérdida de lo propio, cuando se ostenta abundante, armonioso, fecundo; y es malo, cuando arruina lo que es de casa, y roba, no adquiere, lo de fuéra; 160 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.