la fetidez de los gases del cadáver domi.
nó de tal modo que clérigos y fieles huyeron en dispersión.
Así acabó, torturada en la agonía, en el ataúd y en la tumba, la «Soberbia del Rey Guillermo. así reventará el orgullo de las tiranías empedernidas e impenitentes que, sin la aureola de conquistas glo.
riosas, sin el mérito de grandes capacidades, ni el beneficio de reorganizaciones creadoras, nacieron del fraude, vivieron en la imbecilidad y acabarán en la putrefacción. Estas no tienen como aquélla, para defender su causa ante la posteridad, la celebridad de sus servicios y reformas, ni presentan a la admiración del mundo la elocuencia de los contrastes. Su solo distintivo es la continuidad en el mal de que proceden, cuya atmósfera han respirado siempre, y en el fondo del cual acaban atascadas, infectando para siempre con sus actos la memoria de los tiempos que deshonraron.
1914.
RUY BARBOSA Traducción de Eremita.
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