marítima del imperio británico. En Francia, la hostilidad contra la Alemania democratizada, no es menos grande que contra la Alemania absolutista y feudal, y el principio de la nacionalidad se hace muy bellamente a un lado, cuando se trata de impedir la anexión al antiguo imperio, de diez millones de alemanes austriacos. En Italia, los curiales de la política de nacionalidad callan frente a la explosión de universal desdén suscitado por la tentativa de los yugo eslavos de perpetuar en nombre del principio de la nacionalidad un dominio extranjero en la otra orilla del Adriático, nuestra por milenaria tradición, por situación geográfica, por espíritu y por cultura: pero, sobre todo, indispensable para nuestra seguridad y para nuestra expansión.
Es necesario que este movimiento se acelere, se ensanche, se convierta en sistema orgánico de ideas y se transforme en consciente acto volitivo; para esto hay que afrontar y vencer formaciones mentales que se remontan a la lejana edad media.
Derivada en efecto, la ideología democrática, del movimiento intelectual que suele llamarse blosofía de la Revolución 416 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.