rectificación. La sangre de los profetas, derramada por los reyes prevaricadores de Israel ¿ha sido inútil. No quedaría de esos vates sino la expresión de sus dolores, de sus esperanzas y de sus imprecaciones?
No, que ellos son considerados en todos los pueblos de la tierra como la personifi.
cación del valor civil, como ejemplares primarios del hombre libre en medio de los estragos del vicio y los horrores de la cau.
tividad. El magno sacrificio del Calyario ¿no torció el curso ineludible de los acontecimientos? Locura lo juzgaron hombres por muchos conceptos notables de la época. así consideraron los adoradores del Imperio el de millones de mártires de la fe cristiana. La barca del pescador nave.
ga, sin embargo, en el mar de sangre de sus propios sacrificados, y la cruz en la cual fué alzado a la expectación de las gentes ese solitario predicador de la verdad, hace ya 20 siglos, viene presidiendo y rectificando la marcha progresiva de la humanidad. desde Abel hasta Cristo y desde Cristo hasta nosotros, las piedras que han servido para encauzar el curso tortuoso de la humanidad se han llamado y se llaman sacrificios. De la sangre de los anfiteatros romanos y de los sepulcros de las catacumbas surgió el mundo actual.
148 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.