World War

APUNTES APUNTES le Alemania. Con gran sorpresa geblatt no titubeó en publicarlo sola frase a quienquiera que Fo. cayó victima de la censura, nces no se toleraba ni aun la e que Alemania saldria natural la guerra mundial. Pero aun el articulo me vallo varias cartas os superpatriotas que manifesta render que en una hora semejantodavia algo en común con e.
cual, por cierto no me herla da mi vida no he tenido nunca onvertir a otras personas a mis mastaba exponerlas y, sobre todo, paladinamente.
ués, cuando ya habla o vidado tré una carta con estampilla sule la censura; reconoci los trazos na de Romain Rolland. Debia de mulo, pues me escribe: Non, je mes amis. Comprendi en secas lineas significaban un ensayo eria posible, durante la guerra, o epistolar con un amigo austriaediatamente. Desde entonces nos gularidad, y ese intercambio de después por espacio de más de veinticinco años, hasta que la segunda guerra mundial más brutal aún que la primera. interrumpió toda comunicación entre unos y otros paises.
Aquella carta constituyó uno de los grandes momentos de felicidad en mi vida: salia como una paloma blanca del arca de la animalidad que vociferaba, pateaba y se conducia frenéticamente. Dejé de sentirme solitario. Me senti robustecido por la superior fortaleza de ánimo de Rolland. Porque suDe, a través de las fronteras, cuán maravillosamente Rolland habia confirmado su humanidad. Había en contrado el único camino certero que en tales tiempos corresponde emprender a un autor: no participar de la destrucción, del asesinato, sino. conforme al ejeniplo magnifico de Walt Whitman, que durante la guerra de secesión habia prestado servicios de enfermero cooperar en obras de ayuda y de huma.
nidad. Radicado en Suiza y libre de todo servicio militar en atención a su precario estado de salud, se había puesto inmediatamente a disposición de la Cruz Roja de Ginebra, donde se hallaba al estallar guerra, y alll, en habitaciones repletas de archivos, trabajaba dia tras dia en la obra magnifica a la que más tarde procuré rendir público homenaje en un ensayo: El corazón de Europa. Después de las batallas mortiferas de las primeras semanas, queda.
ron rotas todas las comunicaciones. En ningún pais sabran los parientes si su hijo, su padre, su herma