APUNTES e do penalidades, pero aquella noche ecuerdos hondos; agazapados dentro la sombra para no ser descubiertos, modo que el señor Blanco en su diamoche! bajo una nube de zancudos, poder nadie moverse del lugar que aber pasado un bocado desde por la me sorprendida la fortificación enemiga. sólo escaparon; la carga fue a la Os fusiles estaban mojados. Allí quedo El 23 a las a. fueron apresados a, los vapores Wecheler, Morgan, Ma.
por Blanco, don Francisco Alvarado, Per y 45 más, Hé aquí un fragmento de ese hecho: de San Juan del Norte, que hace meses unta, acudió llena de jubilo a dar la costarricenses, trayéndoles refrescos gleses, pasmados de ver a un puñado de balsas deshechas y malos botes venian a asaltar vapores defendidos, acudian s, dibujándolos como estaban, unos sin sin camisa, destrozados todos en la pemojados como pollo que acaba de salir tumecidos de frio bajo su extraño cosus pequeños sombrerillos de palma, sobre la cabeza. Esos hombres enarón costarricense en Punta Castilla. Con Eeron los nuestros subir el rio San Juan. Blanco, Spencer y Cauty, con el APUNTES 195 vapor Morgan. se apoderaron del pueblo y fortaleza del Castillo Viejo, Enseguida cayeron en su poder los vapores. Ogden y La Virgen. éste con dos obuses, dos cañones, 400 rifles y muchas cajas de parque, todo nuevo y en buen estado. El 30 cayo en poder de los costarricenses el fuerto de San Carlos, mediante una estratagema que hizo que el comandante capitán Kru.
ger fuese a bordo del Ogden, El de enero de 1857 fue apresado el vapor San Carlos. que llevando 350 pasajeros, se acercó con entera confianza al fuerte del mismo nombre, y sorprendido se rindió. Los pasajeros venían desde San Francisco de California. Asi quedaron los costarricenses dueños del rio San Juan, el lago de Granada y todos los vapores de Walker; cortaron la comunicación de este con el Atlántico y pudieron comunicarse con los aliados en Masaya. El Presidente Mora dijo en una proclama: todo se ha conquistado sin un sólo tiro, sin una gota de sangre, a fuerza de intrepidez y de sorpresas. ¿con qué contábamos?
Troncos, apenas escarbados o mal unidos con bejucos, han sido nuestra flota para ir a tomar los vapores y fuertes enemigos: fusiles enmohecidos y que apenas podían dar fuego, por los continuos temporales sufridos, nuestras únicas armas: escasez de viveres y de todo en el primer momento, pero habla el coraje, la abnega.
ción, el patriotismo, la UNION costarricense; la reso.
lución de vencer o morir. Cómo poner aquilos nombres de todos los héroes de la expedición. Además de los citados: Joaquín Fernández, Damián Soto, Jesús Alvarado, Santos Mora,