146 APUNTES AP Trozos de la obra: EL MUNDO DE AYER de STEFAN SWEIG (Selección de e. Ver cuadernos y 10) RODIN En casa de Verhaeren se produjo cierto dia una discusión con un historiador del arte, quien se lamentaba diciendo que había pasado el tiempo de la escultura y de la pinture grandes. Lo contradije enérgicamente. No estaba Rodin entre nosotros, quien, como creador, no se quedaba a la zaga de los grandes escultores del pasado? Empecé a enumerar sus obras y, como casi siempre que se lucha contra una oposición, cal en un impetu casi iracundo.
Verhaeren sonrlo. Uno que quiere tanto a Rodin, deberfa, en ver.
dad, conocerlo dijo finalmente Mañana le visitaré en su taller; si te agrada, te llevaré. Si me agradaba? No pude dormir de alegria. Pero frente a Rodin, se me atragantó la palabra. No lograba siquiera hablarle y permanect entre les estatuas como una de ellas. Por modo extreño, esa perplejidad mfa pareció gustarle, pues al despedirnos, el anciano me pregunto. estudio, en Meudon, bi recibido la prim hombres siempre son!
La segunda me ens siempre los más sencil cuya fama llenaba el generación tiene prese de los mejores amigo como en casa de un sabrosa, unas cuantas para acompañarlas, un me infundio mayor val sin embajes, como si e me hubleran sido famille Después del almuerz sala espaciosa que re significativas, pero entr centenares de precios mano, tin brazo, las cri de mujer; en su mayo Recuerdo todavía much únicamente para el pre maestro me condujo trapos humedecidos o retrato de mujer. Apart y arrugadas manos atrás. Proferi sin quere