AnarchismImperialism

144 APUNTES AI desprecio por la convención de Chicago que eligió candidato al célebre declamador la chus.
ma bramante con su programa populista anarquista.
Los últimos años de Godkin no fueron felices. La ola de imperialismo que inundó a Inglaterra y los Estados Unidos, con sus guerras contra los boers y los españoles, le causó gran desasosiego. El mundo rompia sus viejas amarras y se lanzaba en un mar que Godkin miraba con zozobra. La conquista de las Filipinas le parecia una degradación nacional. En noviembre de 1899 escriba. Vamos gateando lenta y penosamente a la manera de los tiempos de antaño, matando media docena de filipinos por semana, y constantemente cerca del fin. La locura de la ignorancia y perversidad que manifestamos tratando de hacer conquistas y tener es übditos sería una vergüenza hasta para un gremio de obreros.
Los años postreros de Godkin fueron años de amargura, y la melancolia y el desallento que estaban apoderándose de su espiritu empezaron a manifestarse en sus cartas. Es éste una enfermedad común entre los liberales.
El idealista tiende siempre a exigir demasiado de la civilización. Treza una via recta a la meta de sui esperanzas, y se acongoja profundamente si la sociedad prefiere encaminarse a otros objetivos por otras vias. Godkin te pero el campo de sus fuertes sus prejuicios.
de la civilización, pero todio de ella; pues la dearse por si misma.
un ideal excelente, pocos hombres de la cuanto los Estados propios derroteros y de Godkin, éste se miento.
En casos extremos tolerancia y el pesimi simismo.
Nos inguila ver Estado de pas se po planeado para la gue rales tengan que defe los ingleses para po La libertad está sien nuenca está muy lejos.