APUNES APUNTES 137 lumana. Por tanto, para God.
churz y los centenares de que buscaron refugio en los spués de la debacle del mo.
ario de 1848, era de suprema gran república norteameri.
fiel a sus tradiciones liberales libertad, no pasase por la la Europa tory. Decía a los que John Wise les había antes: Se os ha llamado a pertad, y así, hermanos míos, Remad con ahinco. Lleváis espero. que el alba y el ngan todo en salvo. Pero zer algo más: queria ser el remeros; y a la edad de leno de esperanza, unió su Estados Unidos, resuelto a en todas las oportunidades en.
muy bien preparado para su crítica. Dotado de una inte.
se mantuvo alejado de lo tomó los objetivos inmedia: Itimos y principales. Su padre biteriano y periodista, y el de disidencia que tanto alismo victoriano le venía por ste se crio. según decía el mismo, en la escuela radical de Mill y Grote. Cuando estaba en la escuela de estudios supe.
riores. escribía a los después, los jóvenes con quienes tenía relaciones y yo éramos liberales, en el sentido inglés de la palabra. John Stuart Mill era nuestro profeta, y Grote y Bentham eran nuestro alimento de cada día.
La filosofía que el joven Godkin, como discípulo de la escuela de Bentham, Mill y Grote, adoptó, era una adaptación utilitarista del laisses faire, y consistía en la doctrina de que el último objetivo social es la mayor felicidad del mayor número, y de que tal objetivo no puede alcanzarse sino mediante la más completa libertad, guiada por la razón y la justicia. Como la expuso Mill, esta filosofia era singularmente persuasiva y hallaba buena acogida en todo espíritu generoso. La libertad, afirmaba él con insistencia, es lo principal que debe desearse; porque, si los hombres son libres, amoldarán a sus necesidades los organismos sociales. El hombre es un animal tanto económico como político, y el difícil problema de las ciencias políticas es impedir que el elemento político y el económico se estorben mutuamente. El hom.
bre económico, impulsado por el instinto adquisitivo, mira al estado político como aliado en la empresa de la adquisición; y el hombre político mira los negocios como asuntos que deben someterse a reglamentación e intervención ri