354 APUNTES mar la individualidad: la herencia, el medio y las reacciones personales.
La herencia es cosa ajena a nuestra voluntad y elección. Tampoco podemos cambiar ni modificar todas las condiciones del medio. Lo que sí está en nuestra mano es el adoptar frente a la vida una actitud nuestra, entera y personalmente nuestra.
Aunque esa responsabilidad pesa por igual sobre todos nosotros, cuando hace nos examen de consciencia y nos hallamos en falta, casi siempre se nos ofrece una excusa para disculparnos.
La menos válida de esas disculpas es la que achaca a nuestra mala suerte lo que nos sucede. Ah, si otros han triunfado es por que la buena fortuna los acompaña y protegel Atribuimos nuestro fracaso, más al azar desfavorable que a nuestros errores inconstancia. Es inútil negar que la suerte es un factor positivo en la vida. En realidad, el que no cuente nunca en sus cálculos con la posible intervención de una suerte aciaga, vive más en un país de ensueño que este planeta de altibajos y mudanzas. Pero no ha producido la tierra todavía nada que pueda equipararse en precio y nobleza con hombre infortunado de genuina individualidad. Lo que da carácter y grandeza a su existencia no es lo que le ocurra, de bueno o de malo, de próspero o de adverso, sino el espíritu con que lo reciba, en un