Individualism

340 APUNTES tura, eran, antes de la guerra actual, precisamente dos pequeñísimas naciones: Suiza y Dinamarca. Juntarlas políticamente habría sido juntar el agua con el aceite.
Suiza, país de montañas y desigualdades geográ.
ficas, poblada por gentes de distintas razas y lenguas, ha sido siempre espontáneamente individualista. Sus habitantes, laboriosos y sobrios, no tienen gran confianza en los gobiernos centralizadores. Contra la enfermedad o la vejez remotas, recurren los suizos al seguro personal, esto es, el ahorro o capitalización.
Dinamarca, país de llanura, de amables paisajes y de igualdades raciales y con una sola religión, el flexible luteranismo, que en vez de perseguir a los disidentes los desarma con su tolerancia; poblada por individuos rosados, sencillos, alegres, enamorados del campo y de la buena vida; agricultores o zootecnistas asombrosos; colectivistas de nacimiento y no por obra de sociólogos; confiantes en su gobierno patriarcal, pero de funciones mínimas; nada dados al ahorro individual; y que por tanto prefieren las diversas formas del ahorro colectivo o seguro social, deseado por todos, sin comprometer su credo religioso en danzas puramente económicas, Excepción hecha de Dinamarca, no sé de nin.
gún país donde los seguros sociales no hayan resul.
tado desastrozos. El departamento de los asuntos socia.
les es en Dinamarca el Ministerio de la Paz Interior, como el Ministerio de Relaciones Exteriores debiera en todas partes el Ministerio de la Paz Internacional, según las palabras de Serge de Chessin, ser