APUNTES 287 quejen de que todo esto no ocurrió más que en el papel, recuerden que solamente en el papel ha llegado la humanidad a la belleza, a la verdad, a los grandes descubrimientos, a la virtud y al amor perdurable. Los historiadores tienen los ojos en la espalda, dice el genial Papini (ver Gog: La Historia al revés. Su costumbre es la de proceder del tiempo pasado hacia el presente, agrega. Mi método consiste en retroceder desde el tiempo presente hacia el pasado; lo cual es más lógico. Un acontecimiento no adquiere luz e importancia sino al cabo de varios decenios o, talvez, siglos. Si encuentro, gr. la entrada de los musulmanes en Jerusalén, el año 637, esto no me parece más que un detalle de la expansión militar del Islam. Pero si parto de 1095, cuando se comenzó a predicar la primera cruzada, se abre ante mí el al.
cance incalculado del acontecimiento. Que los cristianos de Occidente sientan en un determinado momento como ofensa intolerable que el sepulcro. de Cristo se halle en manos de los infieles, y que de este sentimiento nazca el choque entre el Occidente y el Oriente y el comienzo de una nueva civilización; hé aquí el por qué de la importancia de la entrada de Omar en Jerusalén. El después es lo que explica el antes.
Ha llegado el momento de adoptar en historia la regla de oro que ha hecho la fortuna de todas las ciencias: ir de lo conocido a lo menos conocido y hacia lo ignorado. El primer capítulo de una historia bien hecha debe estar constituido por las últimas noticias.
En esas líneas está condensado el pensamiento