224 APUNTES En el estudio de la verdadera naturaleza de la economía, Thoreau llegó con Ruskin a la conclusión de que «el coste de una cosa es la cantidad de lo que llamaré vida que es necesario dar por esa cosa, sea inmediatamente, sea a la larga. En resumen, estoy convencido dice. tanto por fe como por experiencia, de que el mantenerse en esta tierra no es para el hombre una penalidad sino un pasatiempo, con tal que viva sencilla y cuerdamente, pues las ocupaciones de las naciones sencillas son aún las diversiones de las más artificiales. No es necesario que el hom.
bre gane la vida con el sudor de su frente, a no ser que sude con mayor facilidad que yo. En la laguna de Walden y en las riberas del río Merrimac el espíritu de Thoreau disfrutaba de serenidad y sosiego completos; pero esta serenidad griega sufrió una sacudida violenta cuando el filósofo, al regresar a la aldea de Concord, halló a sus vecinos haciendo ejercicios militares y preparándose para la guerra con Mé.
xico, y un funcionario público se le presentó a ordenarle el pago de una contribución. Para Thoreau, esa guerra era cosa odiosa, estúpida e injusta, hecha con el objeto de extender el sistema execrable de la esclavitud de los negros, y él se vio en presencia del problema de sus relaciones