APUNTES 127 No tremendo, no adusto descansas ya.
Mas tutelar y augusto doquier se alce tu busto, con plácida elación se enseñorea; y en tu serena altura mártir perdonas, y recibes cultomto sublime en tu dolor sin amargura; de lisonja perjura manus ant libre por siempre, y de cobarde insulto. otol tu nombre en su vuelo unt más que el de antiguos semidioses crece en tu edad misma y en tu propio suelo. tu historia sin velo en hat las grandezas que fueron oscurece!
sotto il El divinal aliento, que anima la materia y transfigura; nobilísimo humano sentimiento; final recogimiento; cuanto al alma enaltece o la depura, en mística amalgama, cual vago nimbo de tu excelsa frente, Padre te aclama, mezcla de orgullo y de vergüenza siente. ¡Libertador! Delante de esa efigie de bronce nadie pudo pasar, sin que a otra esfera se levante, y te llore y te cante, con pasmo religioso, en himno mudo.
MIGUEL ANTONIO CARO or