46 APUNTES Leyendo Le Matin (Enero y febrero de 1939. La Dépêche de Tolosa traía en los primeros días de enero un luminoso artículo para recordarnos a todos el pacto franco soviético de 1935, tan citado y tan desconocido. Qué dice el pacto? Que si Rusia es atacada, el asunto debe ser llevado ante el Consejo de la Sociedad de las Naciones; que éste debe decidirse por unanimidad; que en todo caso Francia debe consultar a los signatarios de Locarno; que la Sociedad de las Naciones debe poner a funcionar su aparato de sanciones económicas. Ahora bien, la So.
ciedad de las Naciones no es ya sino un recuerdo arqueológico, el pacto de Locarno es polvo, el aparato de las sanciones económicas está entre los fierros viejos. Así, pues, el pacto de 1935 reposa sobre ruinas y sobre viento. Pero los partidarios de la guerra no dejan de citarlo. es automático. la palabra de Francia está empeñada. etc.
La democracia suiza, que puede servir de modelo a todas las demás, ha discernido en el comunismo moscovita al peor enemigo de las democracias. Ella ha hecho dos constataciones terminantes: a El partido comunista depende del extranjero (párrafos 1, 3, 12, 13, 14, 15 y 29 de los estatutos de la Internacional Comunista. El partido comunista tiene siempre por fin el trastorno por la violencia del orden establecido (páginas 6, 32, 71 y 80 del programa de la Internacional comunista. Debiendo la democracia Suiza defender la independencia nacional y asegurar el mantenimiento del