APUNTES 39 venciones todo el tiempo que le sea posible, una vida tranquila de bellos días deportivos o políticos. Pero hé aquí también un pueblo que, si esta vida tranquila llega a ser imposible, será capaz de adaptarse con rapidez extraordinaria y, con extraordinaria tenacidad, combatir.
Acaso nos resulte más fácil representar esta singular naturaleza por medio de una comparación musical. Pensad, por ejemplo, en El oro del Rhin. Toda la masa orquestal va reproduciendo el murmullo poderoso, eterno, del río. El auditorio se siente transportado y como arrullado por aquel torrente de sonidos. Por dentro de este torrente, de cuando en cuando un violín va insinuando un ligero motivo melódico, que muy pronto se pierde entre las ondas de la orquesta.
Así es, aproximadamente, el espíritu inglés: lo esencial en él es una gran corriente de soni.
dos, de recuerdos, de tradiciones e instintos. La inteligencia, de cuando en cuando, emerge por encima de las olas y se nos muestra en tal cual obra bella y encantadora. Pero estos temas no son recogidos por la orquesta. el río continúa llevándose en sus olas al pueblo inglés.
De este río de estas corrientes he tratado de dibujar esta noche para vosotros un mapa aproximado. Me sentiré feliz si, mediante estos rasgos, he logrado hacer para algunos franceses menos complicada y difícil esta navegación.