APUNTES 457 justo acerca de un país que se visita, consiste en permanecer en él durante un tiempo que sea lo suficientemente largo para absorber algo de su espíritu; para poder, sobre todo, encontrar oportunidades de meditar y de soñar en su seno.
La verdadera cultura personal se forma como los terrenos fértiles: por los depósitos que el lento transcurso de los años va acumulando.
Es así como el viajero acumulará mayor suma de cultura efectiva al ver bien unas cuantas cosas, que si ve precipitadamente gran número de ellas. Nadie puede conocer el universo entero. Así pues, el primer lema del turista ha de ser: seleccionar.
El turista sensato se prepara con anticipación y con cuidado, para el viaje que proyecta emprender. Ningún país ha surgido intempestiva y espontáneamente para ocupar su lugar en el globo, con tierras, casas, monumentos, pobladores e idioma, ya completos. Ni más ni menos que un sér viviente, las naciones son algo que crece, se transforma y sufre la influencia de otras naciones: para comprender a un país en su estado presente hace falta familiarizarse con el pasado del mismo. Existen libros en abundancia, sobre cualquiera de los países de la tierra.
En ellos el viajero puede informarse acerca de la historia y del desarrollo de la arquitectura, la pintura, la literatura, etc. de la nación que se proponga visitar.