Violence

426 APUNTES «deber» profesional a expresar con violencia opi.
niones opuestas a su propio convencimiento, lanzando invectivas contra el señor Leterrier y exponiéndole a las iras de las buenas gentes.
El señor Bergeret escribió a su rector una carta de felicitación. El señor Leterrier fué a visitarle. No cree usted dijo el señor Leterrierque hay en la verdad una fuerza que la hace invencible y que asegura, para una hora más o menos próxima, un triunfo definitivo? Esto era lo que pensaba el ilustre Ernesto Renan; esto es lo que, más recientemente, ha sido expresado en una frase digna de ser grabada en bronce. Yo no creo tal cosa dijo el señor Bergeret. Por el contrario, me parece que la verdad se halla muy a menudo expuesta a sucumbir oscuramente bajo el desprecio y la injuria. Podría ilustrar este supuesto con pruebas abundantes. Considere usted que la verdad se reviste de cualidades que la condenan a desaparecer, haciéndola inferior a la mentira. En primer lugar: es una, como dice el padre Lantaigne, su admirador entusiasta; y a mi juicio no hay de qué entusiasmarse; porque siendo la mentira múltiple, desde luego es más poderosa por el número. Por añadidura, la verdad es inerte; no es susceptible de modificaciones; no se presta a las variantes que le permitirían penetrar fácilmente en la inteligencia o en los apasionamientos de los hom