190 APUNTES le plus connu vienen de que no puede quedarse en su cuarto.
Eso sería cierto hace trescientos años. Hoy, por más que úno quiera permanecer en la casa, tiene que echarse a la calle, mejor si está lloviendo, para gozar de la soledad que conviene al recogimiento.
Con el teléfono y la radio, nadie está en su casa: son los demás quienes están en ella. Por esta razón trasmito aquí la siguiente buena noticia llegada de Inglaterra. En el Congreso del Royal Sanitary Institute, en Birmingham, un arquitecto, Pointon Taylor, ha propuesto que, en adelante, en toda construcción nueva, sea previsto un nicho en que pueda guarecerse el jefe de familia y librarse de los ruidos, del alboroto de la progenitura y de las interminables discusiones de la esposa. Contemplando a distancia desde arriba las agitaciones y el tumulto, no se bajará el papá, sino cuando, habiendo gozado de la paz en su corazón, se sienta capaz de hacerla reinar por el ejemplo en el seno de su familia.
Siempre he dicho que no hay mal que no provoque una reacción saludable. Durante un cierto tiempo, más o menos largo, quedamos vacunados contra el mismo mal. Este hecho se observa también respecto a las guerras. La mentalidad de postguerra es siempre opuesta a la guerra. Los desafíos o retos a combate entre los individuos