178 APUNTES tucia pueden sustraernos; que cada quien es el forjador de su propio destino; que lo que hoy sufrimos o gozamos, lo hemos sembrado ayer, como cosecharemos mañana lo que sembremos hoy; que el verdadero interés de cada quien es sacrificarse en bien de sus semejantes, sometiendo las pasiones y los sentimientos a los dictados de LA RAZÓN, organizando la sociedad de manera que ya no haya pobres, sino más o menos ricos, tanto desde el punto de vista moral e intelectual como desde el punto de vista material; una sociedad en la cual cada quien sepa que su dicha consiste en buscar cómo hacer felices a los demás. Reproducimos algunos pasajes del artículo Problemas profanos y Francmasoneria, publicado en la revista SIMBOLO» del mes de julio próximo pasado. E1 fracaso de la organización social actual es una pero.
grullada sobre la que no es necesario extenderse. La explotación cada vez más dura, y, sobre todo, más hipócrita, del hombre por el hombre, horrorosa forma materializada del odio al prójimo, coloca a la Fraternidad en el dominio de un ideal abstracto; la Libertad ha llegado a ser el desarrollo sin freno del Egoísmo. Una revolución no entraña necesariamente un progreso social. Es que no basta concebirla en principio; su dirección escapa fácilmente a sus teóricos; es difícil darse cuenta exacta de la psicología de las muchedumbres, de la poca educación y comprensión de las masas populares. De hecho, el primer objetivo que hay que alcanzar, antes del principio de la acción propiamente dicha, siempre ha parecido sercon razón, la PREPARACIÓN DE LA MENTALIDAD de las muchedumbres. esto puede necesitar un cierto tiempo. este respecto las agrupaciones profanas que estudian las posibilidades de organización del mundo de mañana, economizarán, ciertamente, muchos tanteos en los ajustes necesarios, y no podemos sino