AnarchismFascism

APUNTES 177 no sea reconocida, aceptada y entronizada, la Humanidad se hundirá más y más en la arena movediza del desorden, oscilando cada vez más aceleradamente entre despotismos más y más crueles, y anarquías más y más atroces. priori, no podemos declarar que todas las noticias procedentes del Gobierno de Madrid sean veraces, exactas, conformes con la realidad de los hechos, y que todas las que proceden del lado opuesto sean falsas o mentirosas. En las contiendas políticas el juicio es falseado, obnubilado por los prejuicios, por las pasiones, y CON LA MEJOR BUENA FE se observan mal los hechos y se les interpreta todavía peor. El frío criterio de la Razón cede el sitio a la ceguedad pasional. No olvidemos que la suprema necesidad de toda sociedad, grande o pequeña, es el Orden. El fascismo, como todas las dictaduras, no es otra cosa que la reacción contra los desórdenes engendrados por el justo descontento de los oprimidos, manifestado en las aspiraciones socialistas, que no habiendo podido formular una demostración lógicamente indiscutible del verdadero Derecho, el de la Razón, se han forzosamente dividido en grupos más o menos diferentes, con ideas más o menos diversas, y a una dictadura, a una tiranía, no han podido sino oponer otra tiranía, otra dictadura. Esto explica por qué tanto Moscú, como Roma, como Berlín, consideran enemiga suya a la Masonería. en efecto lo es; en cuanto representa EL DERECHO DE LA RAZÓN en oposición al Derecho de LA FUERZA. Es utópico querer ahogar por la fuerza las aspiraciones socialistas. Para combatir eficazmente ese error es preciso dirigirse a la parte más íntima, profunda, de cada individuo, a su parte moral. Demostrar y hacer aceptar por cada uno y por todos los hombres que no estén cegados por los prejuicios, ni por los fanatismos, ni por el misticismo, que hay una ley de eterna justicia a la cual ni la fuerza ni la as