puntes Apuntes 511 viaducto, me pesó el ensayo, pues en los vagones se sentia la sensación de que el viaducto trepidaba y se movia de un lado a otro, como un puente colgante.
El tren iba alli sumamente despacio, asi es que se me hizo eterno el trayecto y no vine a resollar sino cuando paró el tren en el otro extremo del viaducto.
Ese viaducto era una obra atrevidisima, y según me informaron el proyecto era hacer un gran relleno para tapar el viaducto, pero después hicieron un nuevo trazado y quedo abandonada tan costosa obra.
Un suicidio.
el regreso del vapor Costa José con dirección a Esparta, són tres dias antes de la fecha vapor. Alli residia tio Carlos.
intarenas, pero mi tio le dijo a el vapor yo les pongo un tren dad.
cuando llegamos al puerto ya el. anclas y salia del puerto. Asi, ermanecer en Puntarenas o Es.
llegaba otro vapor. el doctor Marichal, de Cartapara Panamá en el vapor Costa nosotros.
os volviéramos a Esparta y alli que llegó el vapor Colima, en el má.
enia que ir casi todos los dias me aburria mucho en Esparta, a, unas veces hasta Puntarenas. en la Barranca un gran viaducto de pilotes de asaban los trenes. Ese viaducto y daba miedo pasarlo. Los paI tren y a ple pasaban por lo a tomar donde terminaba el or lo menos cuatro cuadras de está muchacho no le tiene miedarme cuenta de la sensación Ha del viaducto en el tren. Hice para que no se diera cuenta en el tren.
ontinuó su marcha y entró al La vispera del dia en que deberíamos embarcarnos en Puntarenas, llegamos a ese puerto y alli pernoctámos, temiendo que nos pasara otro percance y perdiéramos de nuevo la salida del vapor.
Acabábamos de comer en el Hotel Puntarenas, cuando llegó la noticia de que un joven Bolandi se habia suicidado en una casa cercana al muelle.
Como de ese apellido tuvimos un condiscipulo en el seminario, acompañados de un joven colombiano que estaba en el hotel, fuimos al lugar del acontecimiento.
Nos hicieron entrar. El suicida estaba acostado en una cama, revolcándose en ella y quejándose; peTO no hablaba, En ese momento llegó un sacerdote y todos los que estábamos en la pieza del suicida nos retiramos.
Nos informaron que ese joven Bolandi dió mucho quehacer a sus padres, hasta que resolvieron colocarlo en un buque mercante como marinero, con or den de no permitir que desembarcara en ningún puerto.
Ese joven fue el mismo que en el vapor Costa Rica, antes de llegar a Puntarenas, al saber que iba