378 Apuntes que diría Bergson, y en aplicarles las reglas de un sistema forzosa y puramente extensivo.
Desde la aparición del tercero que paga, se ha visto organizarse toda una industria bastarda. la llamo así porque aplica métodos aritméticos a fenómenos inmensurables; toda uma industria hecha de artimañas, juglarismos y componendas.
De tamaña prueba la medicina, a pesar de su resistencia, ha salido perdiendo.
No entiendo como algunos médicos descepcionados con las aventuras y las dificultades de la clientela, se han plegado y luego se han acostumbrado a las servidumbres del funcionarismo, fuerza de sinuosidades encontraron al fin retribución suficiente y por otra parte sintieron sin duda el alivio de escapar a la responsabilidad profesional, esfumándose en la penumbra y en el anonimato que constituyen las condiciones ordinarias del funcionarismo.
Las exigencias y las intervenciones del tercero que paga han comprometido la intimidad del enfermo con el médico; introdujeron en el universo del sufrimiento y de la caridad una multitud de consideraciones matemáticas ineficaces y perturbadoras, abrieron ampliamente las puertas a los métodos y a los artificios del procedimiento, complicaron las tareas burocráticas del médico práctico, hirieron la profesión en su dignidad acusando y exagerando las analogias que pudieran presentar. y que presenta toda profesión