Apuntes Apuntes 305 Historia de un ebanista que realizó la economía dirigida que cada ta se haga justicia por siglo, hablando de la necesidad vertir el actual derecho de gentes hombre, sin distinción de pueblos ido las fronteras para asociar a los secución de los destinos comunes, dad está en formación y toda la ste el desarrollo de los progresos ra cosa que la historia de ese traue está encargada la naturaleza bre. Los gobiernos, los sabios, los la historia, son instrumentos proonstrucción secular de ese grande mundo, que acabará por constimas bases, según las mismas leyes la naturaleza moral del hombre constitución de cada Estado sepas o ingenuidades, lo que fuereticular, son, pues, muy viejas. Si confiaria de ellas.
La Prensa Libre, 29 de febrero Hay en Copenhague un club de librecambistas que se han propuesto demostrar amenamente la futilidad de ciertas teorias económicas muy gustadas ahora en el mundo, en la época de desvarios de postguerra. Con ese fin, publica dicho club interesantes fábulas y cuentos reunidos en folletos. Lease como ejemplo el epilogo que aquí traduzco: Habla una vez en un pueblecito danés un ebanista especializado en la fabricación de ataúdes. Un dichoso día se le ocurrió que era de veras justa, digna y recomendable la teoria de la balanza del comercio: No compro sino a quien me compra. Por tanto, decidió ponerla el rigurosamente en práctica, sucediérale lo que le sucediera. Para comenzar, hizo saber al pulpero y al panadero que les retiraba su clientela mientras no obtuviera la de ellos. Pero el pulpero y el panadero, no sintiéndose en peligro de muerte, se negaron a encargar de antemano sus ataúdes. Lo misnio hicieron los otros comerciantes del pueblo, de modo que al punto nuestro carpintero, esclavo de sus principios, no encontró un lugar donde comprar lo que necesitaba para vivir y para sostener su taller. Naturalmente, éste empezó a ir a menos.
Quiso sin embargo la suerte que un terrible accidente sobreviniera en una gran fabrica de productos quimicos de la localidad. Saltó la fábrica y murieron sus dos directores, Peña y Lázaro. Sus viudas se dirigieron al momento al ebanista y le encargaron dos de los mejores ataúdes. Pero especificaron que el trato se haria según los principios de la economia Libre del de marzo ha vuelto a cidez habitual don Clemente Mato no disponer de espacio para alo. Se mantiene en su actitud de aza respecto a los yanquis y con e han sido o son novedades «la mocracias, el falansterismo, el coascismo, etc. Nótese, entre paréna griega falansterio y la italiana intes.