A puntes 63 ESTACIÓN. Quién a ver otros campos y otros cielos no aspira. quién la vaga o limpia, luminosa u oscura raya del horizonte no tienta a la aventura?
CASA: En la tierra la clave de todo bien se encierra, y quien mira más lejos es quien mira a la tierra. No, No! Contra la madre nunca hay razón.
ESTACIÓN: Muy ruda es la labor del hombre que trabaja y que suda como el buey y el jumento, y en quien muere ignorado talvez un bello espíritu, un poeta, un soldado.
CASA: Déjalo que sin nombre y oscuro se consuma, que la hoz por alfanje y el arado por pluma siegue cándidos cuellos de virgenes espigas y escriba en rectos surcos baladas y cantigas.
Déja que el campesino, cuya labor callada se hace en la lira cantos y victoria en la espada, sin necias ambiciones, siguiendo a pasos lentos los de la tarda yunta, cumpla los mandamientos de la ley de la tierra.
ESTACIÓN: Con métodos mejores, de avanzados países vendrán los sembradores a escribir sus poemas.
CASA: a sembrar la semilla del dolor en el alma de la gente sencilla.
ESTACIÓN: Dondequiera ve sombras vuestro injusto recelo.
Hasta el sol tiene manchas, y a veces hasta el cielo,