52 puntes CASA: Dejemos estas cosas para después. Cayendo van las espesas sombras, la brisa se ha dormido y los ruidos del campo muriendo van sin ruido. Mira! Sus puertas abre la bóveda infinita y se encienden sus luces y el arroyo musita su plegaria nocturna. Nos llama Dios: es hora de rezar. Buenas noches.
ESTACIÓN: Buenas noches, señora.
DIALOGO SEGUNDO ESTACIÓN: Buenas tardes, señora.
CASA. Ya vuelve la tormenta?
Dios te guarde en su mano.
ESTACIÓN: Hoy parecéis contenta.
Vuestros muros sonrien, brillan vuestras ventanas.
CASA: El sol ha calentado mis paredes ancianas.
ESTACIÓN: Hay de un gozo más íntimo en vuestra faz señales.
CASA: Buenas nuevas registran los campestres anales: sopla el viento hacia arriba y ha cambiado la luna; ayer perdi una oveja, mas hoy, por mi fortuna, un nuevo ternerico mi senectud alegra: blanco, fino, sedoso, con una mancha negra