20 puntes y su temblor rosáceo en las combadas corazas se refleja, y para siempre deja notas de amor en todas las miradas.
Es como la pintada profecía que hace el fino diseño del paisaje limeño: jun leve tono rosa en la armonia de un gris de perla y sueño. es algo más! El símbolo divino de la Fuerza a la Gracia sometida y el poder perdurable ante la vida de lo suave, lo efímero y lo fino. se forma el cortejo de la rosa como para una majestad. Un lento son de campana eleva su armoniosa balada en la frescura del momento, un encanto pascual se diluye en la hora matutina, y a la naciente catedral camina el cortejo floral.
Con un ardor sincero marcha el cortejo con su rosa nueva hacia la catedral; y es el primero de nuestros arzobispos quien la eleva a la Virgen María en la iglesia inconclusa todavía.
Jerónimo de Loayza alza la flor con un voto recóndito y profundo, y le pide a la Virgen con fervor que en este Nuevo Mundo deje caer los dones de su amor. mientras como una hostia alza el prelado la flor, entre el rumor